lunes, 8 de noviembre de 2010

BENEDICTO...QUÉ BURRADAS PARA ESTAR HABLANDO EN NOMBRE DE DIOS!!

El artículo 16.3 de nuestra Constitución dice: "Ninguna confesión tendrá carácter Estatal. Los Poderes Públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y demás confesiones".

Vaya por delante que yo soy Católico, pero cada vez más de una relación directa entre Dios y yo, sin intermediación humana. El hombre, por humano, no puede erigirse en portavoz de la palabra de Dios.
Y no hay más que ver los últimos acontecimientos en los que los portavoces de la Palabra de Dios, están igual de contaminados que los pecadores a los que quieren salvar sus almas, como para creer.

Pero hoy quiero hacer una reflexión al hilo de unas declaraciones desafortunadísimas del Papa Benedicto XVI, tachando al Estado español, bueno, concretamente a su gobierno de "anticlericalista" y "laico", cargando contra  él por lo que considera un ataque a la Iglesia. Llegando a tal su discurso dislatado, que llegó a comparar la situacíón actual con la situación "anticlerical" de la 2ª República donde se quemaban conventos, se violaban monjas y se asesinaban curas.
En principio la comparación es disparatada, el Papa, por su cargo no ya religioso, si no también como Jefe de Estado de ese estado que es el Vaticano, debería ser más prudente en sus declaraciones, y si no podemos apelar a su prudencia, sí a su veracidad.. Pero claro, qué podemos pretender de una homilía dictada por el cardenal Rouco Varela (yo le llamo el Richelieu español por lo que intriga en "la corte", en este caso en contra del Gobierno).

Aquí Benedicto, no sólo (o solo, según "lo nuevo" de la RAE) no se queman iglesias, ni se violan monjas ni se matan curas, si no que la Iglesia católica a pesar de ser éste un Estado aconfesional en la que no debe haber una religión oficial, goza de unos privilegios que para sí quisieran el resto de las confesiones (que las hay) que profesan los ciudadanos españoles. Me explico:

Desde los años 50, con Franco, España llegó a unos acuerdos con la Santa Sede en materia sobre todo económica, pero también social, educacional, jurídica. Estos acuerdos fueron renovados en los años 70 y 79. Estos acuerdos se tenían que haber renovado hace muchos años. El Gobierno español podría perfectamente dar por terminado esa vinculación con ese Concordato, pero ha seguido prestando esas ayudas reflejadas en un contrato ya vencido.
Estos acuerdos incluyen contraprestaciones económicas a la Iglesia. Se estableció la fórmula del impuesto del IRPF para que parte de esos impuestos, los que los contribuyentes creyentes lo solicitaran, fueran a parar a manos de la iglesia. El Estado adelantaba un dinero a la Iglesia con cargo a esos ingresos por impuestos. Resulta que sólo un 32% de los contribuyentes marcaban  la crucecita a esa ayuda, por lo tanto lo recaudado era menos de lo que ingresaban por ese concepto la iglesia. Pues bien, la Iglesia no devuelve la diferencia, y el Estado se la perdona. Viene a perdonar el Estado a la Iglesia en ese concepto, del orden de 30 a 50 millones al año.

Por otro lado está la gran ventaja de estar exonerada del pago del impuesto del IVA. Se financian a fondo perdido (es decir, se da un dinero para no verlo más) obras y construcciones cuyo uso va a ser eclesiástico.
Subvenciones de las Comunidades Autónomas en base a sus proyectos sociales.
El Estado da 6.000 millones de Euros a la Iglesia para actividades educativas, sociales, sanitarias. Sólo en centros escoalres se ceden 3.500 millones, más otros 600 destinados a pagar a los profesores de religión o de otras materias en los Centros concertados.

A parte de todo ésto, como entidad privada que es, la Iglesia puede obtener beneficios de sus propiedades como le venga en gana. Últimamente está de moda el cobrar por las visitas a catedrales, museos eclesiásticos, monasterios. Y creedme que también de ahí sacan un buen dinero.

La visita de estos días del Papa, le ha costado al Estado, entre seguridad, sanidad, limpieza unos 30 millones de euros.
El año próximo se celebra la JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD. El Congreso aprobó ese día como Bien de Interés Cultural. ¿qué quiere decir ésto? Pues quiere decir que las empresas que quieran financiar ese evento, tendrán unas exenciones fiscales de hasta un 80%. Las distintas administraciones correrán, además, con unos gastos que superarán de nuevo los 30 millones de euros.

¿No os recuerda la venida del Papa, a la de aquel familiar "gorrón" que temblamos cuando dice que va a visitarnos porque se hospeda en nuestra casa "sine die", y encima no suelta nada para gastos?

Recomendaría al Papa que fuera más solidario con un país en crisis, si es para gastar lo que gasta, que no venga tanto. Si es para criticar y atacar algo que no hay justificación para que lo haga...QUE NO VENGA NUNCA!!!.

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